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Channel: Platos de verduras y recetas vegetales | Lifestyle
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Alcachofas gratinadas al horno

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Cuando se trata de cocinar al horno, siempre sentimos alivio, ya que es mucho más saludable que usar la sartén, no ensuciamos tanto la cocina y nos permite realizar otras tareas en segundo plano como realizar llamadas, consultar el correo, tender la ropa o incluso hacer algo de deporte en casa. Estas alcachofas gratinadas son una versión saludable de la receta clásica, además, también podemos convertirla en una receta vegana.

Las alcachofas, a priori, no tienen un aspecto muy delicioso, puesto que se trata de un fruto escondido detrás de sus hojas, como le pasa a la piña, tanto la fruta como la que da los piñones. Todos los alimentos que se esconden detrás de una coraza tan impenetrable, a veces nos causan rechazo.

Sin embargo, las alcachofas son sanísimas, riquísimas y sabrosísimas, siempre y cuando sepamos sacarle todo el partido. Vamos a modernizar una receta tan sencilla como las alcachofas gratinadas al horno, además, vamos a dar una versión vegana, ya que solo tenemos que cambiar un ingrediente.

En este texto vamos a saber por qué las alcachofas son tan necesarias para el organismo, cómo convertir esta receta en una comida apta para veganos y vegetarianos estrictos y cómo conservar todo lo que nos sabre. Antes de esperar a que nos sobre comida, nosotros somos partidarios de calcular bien cuántas personas van a comer, y en base a eso, realizar la receta, de forma que solo tendremos que dividir o multiplicar las cantidades que indicamos a bajo.

¿Por qué las alcachofas son tan importantes?

Las alcachofas son realmente nutritivas, aunque sabemos que al principio puede echar un poco para detrás su aspecto, pero cuando las probemos con nuestra receta, cambiaremos de opinión. Además, una vez más, esta receta cumple con nuestros pilares. Se trata de una receta saludable, baja en grasas, con ingredientes 100% naturales, económicos y fáciles de encontrar.

Esta receta tan simple la tendremos lista en menos de 30 minutos y solo tiene 121 kilocalorías, 6 gramos de grasas, 3 gramos de grasas saturadas, unos 10 gramos de azúcares y menos de 1 gramo de sal.

Una alcachofa por la mitad

Las cantidades varían en función del tipo de queso que usemos y si agregamos otros ingredientes extras. Hay quienes le ponen merluza, aguacate, Bacon, jamón, e incluso salmón. Ya ahí entra el gusto de cada uno. Nosotros a veces le hemos puesta pan de semillas a modo de plato con la alcachofa gratinada encima y queda una tapa perfecta para poicar antes de almorzar.

La importancia de las alcachofas llega porque esta verdura es muy rica en vitaminas y minerales. Concretamente tiene vitamina A, B6, C y E, y los minerales son calcio, hierro, yodo, magnesio, zinc, sodio, potasio, fosforo y selenio.

100 gramos de alcachofas aportan 44 kilocalorías, 2,3 gramos de proteínas, 0,1 gramos de grasas, 7,5 gramos de hidratos, 2 gramos de fibra, nada de colesterol y casi el 90% es agua.

Así puedes hacer alcachofas gratinadas veganas

Si bajamos hasta abajo veremos que en esta receta no hay bechamel, ya que hemos querido simplificar al máximo la receta para que sea baja en grasas y más saludable. Una persona no vegana puede usar el queso que se le antoje, desde un curado cortado en finísimas láminas, hasta un paquete de 4 quesos rallado, cuadraditos de queso gouda, emmental, e incluso quesitos blandos.

Pero claro, en el caso de ser veganos, no podemos usar queso de origen animal, puesto que esta alimentación excluye todos los alimentos que son de origen animal incluida la leche, los huevos y hasta la miel.

Es por esto que en este caso se usará un queso vegetal y que preferiblemente sea apto para derretir o gratinar. Conviene usar un queso vegano de calidad y muy sabroso, para que aporte a la receta, de lo contrario, quedará una pasta crujiente encima de las alcachofas.

Cuidado con este tipo de quesos, ya que a veces tardan mucho más en gratinar que el queso convencional hecho con leche de vaca u otro animal. No creamos que por dar más potencia al horno se gratinará antes, sino que estropearemos toda la receta y el queso se quemará.

Consejos para mejorar la receta

Lo más importante es que las alcachofas sean grandes y de muy buena calidad. También debemos seguir muy a raja tabla el hecho de usar un limón, y aquí cada uno decide si frita el limón por las alcachofas o echa el zumo en el caldo de hervir. Nosotros a veces hemos hecho ambas cosas.

Lo mismo sucede con la mantequilla y el queso. Ambos son ingredientes imprescindibles, sobre todo el queso, ya que la mantequilla solo le da jugosidad y humedad al gratinado. El queso ha de ser de sabor intenso y de muy buena calidad, así pues, tanto en el queso como en la mantequilla el ingrediente principal ha de ser leche y que sea queso especial para gratinar.

Un hombre rallando queso

Si usamos margarina, debemos asegurarnos que sea de aceite de oliva, en lugar de aceites de girasol o refinados. En todo caso, como mínimo, que sea aceite de girasol, pero alto oleico.

Para que tengan mejor sabor y aspecto cuando vayamos a comerlas, lo mejor es sacarlas de la nevera unos 20 minutos antes y después calentar en microondas o aprovechar el calor del horno, en caso de que lo estemos usando para algo.

Cómo conservar la receta

La receta que nosotros explicamos a continuación, está enfocada para 4 personas. Si vemos que es mucha cantidad de comida, podemos hacer la mitad, y así reducimos los desperdicios de alimentos.

Loque sobre si estaba bueno y queremos conservarlo para el día siguiente, lo que tenemos que hacer es esperar a que se enfríe y depositar las alcachofas gratinadas que hayan sobrado en el interior de un tupper de cristal con cierre hermético.

Nada de echar salsas, ni jugo de limón para conversar, ni echar más queso, ni nada. Solo las alcachofas gratinadas y cerramos la tapa con cierre hermético. Esa comida se mantendrá en buen estado al menos durante 3 días, pero recomendamos guardarla al fondo de la nevera y no estar abriendo el tupper constantemente.

Para evitar la contaminación de los alimentos, recomendamos manipularlos con utensilios limpios y no comer directamente del tupper a menos que nos lo vayamos a comer todo de una sentada.


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